Rodeada de un jardín mediterráneo y romántico con una hermosa fuente y varias zonas para sentarse, la villa, amueblada con cariño y exclusividad, está situada en un lugar tranquilo y único.
Desde las amplias terrazas se puede disfrutar de las vistas al mar, el amanecer y el atardecer.
Las sensacionales vistas al mar se pueden disfrutar desde todas las habitaciones y el acceso directo al mar redondea las comodidades de esta propiedad.
El cercano puerto pesquero y deportivo de Porto Petro con muchos buenos restaurantes, así como varias playas de arena como Cala Mondrago, Calo des Pou, S'Amarador y muchos más se puede llegar en 3-10 minutos.
¡Una propiedad para soñar!
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