En el corazón del Cuadrat d’Or, en una tranquila calle peatonal, se encuentra esta propiedad de 125 m² situada en una finca regia catalogada de 1934, una joya arquitectónica que conserva la esencia del Eixample más auténtico.
Los techos ornamentados, los ventanales con molduras y el balcón que une dos galerías hexagonales suspendidas son algunos de los detalles originales que mantienen su encanto histórico.
Actualmente utilizada como despacho, la propiedad está registrada oficialmente como vivienda, lo que permite transformarla en un hogar único, elegante y lleno de personalidad. Su distribución versátil ofrece la posibilidad de crear dos amplios dormitorios dobles y añadir un baño adicional, además de los dos existentes.
El interior destaca por su patio privado, que aporta luz natural y serenidad, generando un ambiente íntimo y acogedor en pleno centro de la ciudad.
La ubicación es inmejorable: junto al Mercado y la Iglesia de la Concepción, a un paso de Paseo de Gracia, Paseo Sant Joan y la Gran Via. Rodeada de espacios verdes, cafés, comercios y propuestas culturales, esta vivienda representa la oportunidad de vivir el estilo de vida barcelonés más elegante y auténtico.
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