En uno de los rincones más auténticos de la costa de San Bartolomé de Tirajana, se esconde este chalet adosado de dos plantas que redefine el concepto de hogar. Rodeado de una amplia terraza que abraza la vivienda, cada rincón ha sido pensado para disfrutar: desde el asador con horno de leña, perfecto para esas comidas que se alargan sin prisa, hasta la pérgola que resguarda un coqueto rincón chill-out donde el tiempo parece detenerse.
El acceso principal conduce a un salón bañado por la luz natural que entra a raudales por sus grandes cristaleras.
El ambiente, cálido y elegante, se mezcla con la brisa del mar que llega desde las piscinas naturales, a pocos minutos caminando, donde lugareños y visitantes disfrutan de un baño relajado al atardecer.
Junto a la terraza, una sorpresa: una construcción con techo de madera convertida en una encantadora taberna privada.
Con su barra, mesa de billar y una decoración que cuenta historias de viajes por el mundo, este espacio invita a vivir momentos memorables.
Mañana puede transformarse en un apartamento independiente, una sala de juegos o un estudio creativo… la versatilidad es una de sus grandes virtudes.
En la planta baja, el pasillo distribuye un dormitorio exterior con vistas directa a la terraza, un baño moderno con plato de ducha, una cocina de diseño minimalista y un amplio salón que se abre hacia el exterior, integrando luz, espacio y vida.
La planta alta ofrece tres habitaciones: una convertida en un práctico vestidor, otra luminosa con vistas, y la suite principal, que enamora con su balcón orientado al sur, desde donde el mar se adivina a cada amanecer.
Un rincón ideal para leer, tomar un café o simplemente disfrutar del sonido del océano.
El Castillo del Romeral es un lugar con alma marinera.
Sus piscinas naturales y su pequeño puerto pesquero conservan el encanto de un pueblo donde la tradición se mezcla con la calma. La playita frente a la Cofradía de Pescadores es perfecta para un baño tranquilo o para saborear un pescado fresco mirando al horizonte.
Aquí, cada detalle está cuidado, cada estancia tiene una historia y cada rincón invita a quedarse.
Una vivienda única en un entorno que lo tiene todo: autenticidad, mar y calidad de vida.
Ven a descubrirlo y déjate sorprender por todo lo que esta casa tiene para ofrecer.
No es solo una vivienda, es un estilo de vida frente al Atlántico.
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