Este gran chalet para reformar y construido en el año 1.974, se encuentra ubicado en una zona tranquila de montaña que ofrece un alto nivel de vida para los amantes de la naturaleza. Se ubica en una gran extensión de terreno propio, donde encontramos distintas zonas que le dan una gran versatilidad de uso.
Con 523 m2 construidos, se emplaza en una parcela de 3.647 m2, prestando gran atención al detalle de su fachada con recubrimiento de piedra que le da un toque vintage. Dispone de espacios abiertos de gran tamaño, destinados al ocio y descanso.
Una vez cruzada la entrada principal, nos encontramos con una preciosa zona boscosa perimetral con flora variopinta, grandes árboles que dan sombra y cobijo, porche cubierto, encantadora piscina con solárium y áreas de recreo ideales para celebraciones familiares o de amigos.
Distribuido en una planta con semisótano, en la principal nos recibe un vestíbulo de entrada con acceso a un amplio y luminoso salón-comedor con chimenea, salida a tres terrazas una de ellas acristalada, y a través de una escalera de caracol, llegaremos a una habitación mirador donde se puede disfrutar de unas hermosas vistas panorámicas. Volviendo a la zona noble, disfrutaremos de una espaciosa cocina con lavandería aneja, 2 habitaciones triples, 3 habitaciones dobles y tres baños completos.
En la planta semisótano, gozaremos de un acogedor salón con chimenea, zona lúdica de usos múltiples, cochera cerrada, bodega, y tres distintos recintos de almacenaje de grandes dimensiones.
Cabe señalar que la estructura exterior de inmueble está en óptimas condiciones, pero la parte interior requiere de una rehabilitación completa. Entre sus características más destacables podemos señalar, carpintería interior en mobila, exterior de madera con contraventanas abatibles, suelo de gres, armarios empotrados, dos chimeneas de leña, acometida de luz y agua pero con suministros no dados de alta, cimentación de losa de hormigón armado, cubierta de teja curva, todas las habitaciones exteriores, mucha luminosidad gracias a sus grandes ventanales y estructuralmente en óptimas condiciones.
En definitiva, una opción inmejorable para disfrutar de la tranquilidad en un entorno idílico, sin renunciar a ningún tipo de comodidad, con unas fantásticas vistas a la montaña, en una atmósfera encantadora y rodeado de la naturaleza lo que lo convierte en una opción ideal para residir. En cuanto a los servicios básicos, dista tan solo 2 km. de la población de Barx que dispone de todos los mismos y 10 Km. de Gandía capital de La Safor.
No pierdas la oportunidad de visitarlo.
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