En la zona de Salinas, en plena Costa Sur y a menos de 10 minutos de la playa, se encuentra esta casa adosada de 213 m² construidos, con piscina privada y un sinfín de espacios que invitan a disfrutarla desde el primer día. Aunque necesita pequeños retoques estéticos, lo que ofrece a cambio es un abanico de posibilidades difícil de encontrar en esta ubicación.
Distribuida en varias plantas, en el nivel -1 encontramos un garaje amplio con puerta automática, un almacén y un gimnasio privado, perfecto para quienes valoran la comodidad sin renunciar al espacio.
En la planta principal, un recibidor da paso a un salón comedor con luz natural, cocina independiente, un baño completo y una habitación individual. Ya en la planta superior, dos habitaciones dobles completan la zona de descanso, destacando especialmente la suite principal con baño privado y acceso directo a una terraza privada donde el sol y la tranquilidad son protagonistas.
Las terrazas, el jardín y la azotea suman múltiples zonas exteriores donde desconectar o compartir, con posibilidad incluso de crear una buhardilla en la parte superior. Además, la casa cuenta con detalles muy prácticos como calefacción de bajo consumo, aire acondicionado, doble ventana, tejado en buen estado y una terraza de gran amplitud.
Una casa luminosa, versátil y con carácter, ideal para una familia que valore la cercanía al centro y el confort de tenerlo todo en casa.
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