Una propiedad que transmite calma, espacio y calidad en cada rincón.
La casa combina perfectamente zonas de convivencia, confort y naturaleza, convirtiéndola en un lugar donde es fácil imaginar una vida plena y relajada.
Con unos 537 m² construidos sobre una parcela amplia y soleada de aproximadamente 2.000 m², la vivienda está distribuida principalmente en planta baja, lo que la hace muy funcional y cómoda para el día a día. La entrada nos lleva a un vestíbulo acogedor que separa la zona diurna de la zona de noche.
La cocina office es amplia, cálida y totalmente equipada, con mucha superficie de almacenaje, chimenea y salida directa al porche y jardín. El salón-comedor con chimenea disfruta de luz natural y vistas abiertas a la piscina.
En esta misma planta encontramos la zona de descanso formada por cuatro dormitorios dobles (uno en suite), dos baños completos y lavadero. Las habitaciones con ventilación natural, algunas con aire acondicionado, y baños revestidos en mármol que aportan personalidad y amplitud.
La planta inferior está pensada para disfrutar y reunir. Destaca un gran comedor para más de 15 comensales, ideal para celebraciones familiares, y salas polivalentes perfectas para convertir en sala de cine, gimnasio, juegos o estudio. También encontramos un garaje para varios vehículos.
En el exterior, el jardín es protagonista: extenso, verde, con espacio para respirar y vivir al aire libre. La piscina privada integra la casa con el entorno, y el porche con barbacoa permite largas veladas estivales. También hay zonas llanas para jugar, hacer huerto, instalar chill-out y mucho más.
La casa dispone de aire acondicionado, calefacción de gasoil, cierres oscilobatientes y sistema de alarma interior y perimetral, reforzando confort, tranquilidad y seguridad.
Un espacio para quien valora la privacidad, la luz, las superficies amplias y el estilo de vida mediterráneo.
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