Casa de campo semi reformada, situada en una gran finca en las afueras del pueblo de Arta.
La finca de forma irregular, con pronunciado desnivel, ofrece buenas vistas a las montañas de los alrededores. Dispone de una parte rústica con variedad de arboles autóctonos de las islas, y otra parte de bosque de pinos y matorrales.
En la finca hay construida una casa que mantiene su encanto tradicional. Antiguamente, formó parte de una almazara, que con el paso de los años se ha convertido en 2 viviendas totalmente independientes y separadas.
La casa, de 2 plantas, se distribuye en entrada comedor con una cocina abierta completamente amueblada y con chimenea, 1 baño completo, 2 dormitorios dobles con chimenea, y un salón en la planta baja. En el primer piso, hay 1 gran dormitorio doble con un gran salón.
La casa está rodeada de jardín con 2 terrazas y un trastero. También hay una pequeña caseta usada como almacén.
La casa dispone de calefacción con gas propano y se vende semi amueblada.
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