En Murcia, se encuentra una bodega única en medio de 48 hectáreas de terreno, ubicada a 750 metros sobre el nivel del mar. Esta altitud es conocida en todo el mundo como ideal para el cultivo de uvas de calidad, y el suelo mineral, que alguna vez fue el fondo del mar, ha sido comparado en análisis con regiones vinícolas de élite en Europa, como Jerez de la Frontera y el sur de Borgoña.
Esta bodega ha sido galardonada con numerosos premios internacionales que atestiguan la calidad excepcional de sus vinos. Además, su ubicación estratégica a tan solo 129 kilómetros del puerto marítimo de Valencia, 340 kilómetros de Madrid, y su proximidad a los aeropuertos y playas de Alicante y Murcia, facilitan la logística y distribución de sus productos.
El suministro de agua es crucial en la viticultura, y aquí se cuenta con un manantial artesiano que se encuentra a unos 300 metros de profundidad. Las cualidades únicas de esta agua pura han sido confirmadas por innumerables análisis, respaldados por un depósito de agua propio de 1 hectárea con un volumen de 25,000 m3.
El sistema de riego es de vanguardia, con un sistema dual que incluye riego por goteo y riego por aspersión. Además, todo el viñedo está cercado con una valla de dos metros de altura, una característica poco común en España pero de gran importancia, ya que brinda seguridad al viñedo y evita la entrada de animales salvajes, garantizando así uvas de la más alta calidad.
El viñedo no solo produce uvas; también alberga alrededor de 70 árboles frutales, incluyendo higos, albaricoques, manzanas, peras, cerezas, nueces, ciruelas y melocotones, además de 250/300 olivos de 4 años. Todo el viñedo sigue prácticas ecológicas para garantizar un vino excepcional y respetuoso con el medio ambiente.
La selección de uvas incluye Cabernet Sauvignon, Petit Verdot, Syrah, Merlot, Tempranillo y Monastrell, cada una aportando su carácter único a los vinos.
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