KV131V. Bañada por la luz dorada del Mediterráneo y con vistas abiertas al mar desde ambos lados, Villa Ámbarina se eleva sobre el paisaje de Balcón al Mar, una de las zonas más exclusivas de Jávea. Totalmente reformada en 2024, esta residencia redefine el lujo mediterráneo con una mezcla perfecta de elegancia ibicenca, calidez natural y diseño contemporáneo, empleando materiales nobles como la tosca, la madera y el microcemento.
Sobre una parcela de 1.200 m², la propiedad ofrece 429 m² construidos, distribuidos entre la vivienda principal de dos plantas y una casa de invitados independiente. Su orientación sureste y su posición elevada garantizan una luminosidad constante y un diálogo permanente con el mar y la naturaleza.
Vivienda principal
En la planta baja (125,80 m² más 20,60 m² de porche acristalado), los espacios fluyen con naturalidad y una atmósfera de calma. El salón, coronado por un techo abovedado con vigas de madera vistas, enmarca el exterior con amplios ventanales que bañan la estancia de luz y conectan con la terraza. La chimenea Hergom añade calidez y carácter artesanal.
El comedor, situado en el porche acristalado de forma redondeada, se abre directamente a la piscina, creando una continuidad visual entre el interior y el exterior.
La cocina, de estilo ibicenco contemporáneo, combina muebles de microcemento, madera natural y encimeras porcelánicas. Los electrodomésticos Bosch Serie 8, la doble nevera, las estanterías de roble retroiluminadas y el rincón de café reflejan una elegancia funcional y atemporal.
En esta planta también se encuentran dos dormitorios con baño en suite, ambos con duchas de microcemento y armarios empotrados.
La planta semisótano (98,40 m²), a la que se accede a través de la escalera interior y también desde la terraza. Alberga una sala polivalente (sala de estar, gimnasio o dormitorio), un baño con ducha, lavandería, bodega y dos trasteros. Desde aquí, un pasillo conecta con el garaje cerrado (36,90 m²). Una escalera exterior conduce a la terraza solárium en la azotea, un auténtico mirador sobre el mar y las montañas.
Casa de invitados y dependencias auxiliares
La casa de invitados (100,60 m²) mantiene el mismo estilo cálido y natural: una naya acristalada, cocina equipada, salón, dormitorio doble con baño en suite y trasteros adicionales.
Completa el conjunto un despacho independiente con un bonito porche y vistas al mar, ideal para quienes buscan teletrabajar o disfrutar de un espacio creativo rodeado de calma.
Exterior: un refugio bañado en luz ámbar
El exterior de Villa Ambarina es una oda a la serenidad mediterránea. La piscina de 10 x 5 metros (52,80 m² de lámina de agua), revestida con azulejos verdes balineses, refleja el cielo y se funde con el entorno. A su alrededor, piedra natural alemana, sombrillas de fibra vegetal y tumbonas de madera componen una escena de armonía y sofisticación.
El jardín mediterráneo, con grava, setos maduros y árboles frutales, se integra de forma orgánica con la arquitectura. Su diseño minimalista y de bajo mantenimiento refuerza la sensación de equilibrio.
En Villa Ambarina, cada elemento, como la textura del microcemento, la calidez de la madera y el reflejo del mar, crean una atmósfera de belleza natural.
Un hogar donde el lujo se mide en calma, espacio y autenticidad.
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