1958. Ponemos a la venta una de las propiedades históricas más singulares y emblemáticas de Asturias y de Oviedo, El palacio de Marcenado de Latores, que se encuentra a 4 km del centro de la ciudad de
Oviedo en un barrio que le da nombre al palacio, zona tranquila y verde, con unas vistas a la sierra del Aramo que hacen del entorno del palacio una zona especial.
La orientación del complejo es sur, tiene muy buenos accesos a la autopista A-66.
El excelente conjunto, lo forman un cuerpo rectangular del s. XVIII, una torre cuadrangular y una capilla (ambas de fines del XVI-principios s. XVII). El escudo de armas de la fachada
corresponde a la familia Valdés y Lavandera.
El cuerpo rectangular, de dos pisos, muestra en la calle principal una adintelada puerta,
además de un central y saliente balcón custodiado por dos escudos. El grupo de vanos lo
completan balcones no volados en la planta superior y huecos enrejados en la inferior.
Con tres pisos, la torre encuadra su adintelado ingreso mediante una moldura embellecida
con rosetas y acanaladuras. Un escudo figura en la clave; por encima de él, hay una
hornacina, donde se abren dos vanos a cada flanco, que aloja la talla de un evangelista.
Un saliente y central balcón con baranda de hierro se abre más arriba.
A la lateral capilla, con un pórtico, soportado por cuatro columnas dóricas, y una espadaña,
iluminada de forma natural por veneras, le proporciona entrada la torre, teniendo su acceso a través de una escalera de piedra.
En el plano anexo se puede apreciar la distribución del palacio, siendo las superficies:
1. Planta baja incluida la capilla 336
2. Planta principal 315
3. Torre 49
4. Garaje 30
5. Bajo cubierta 250
Haciendo un total de 980 metros cuadrados de superficie.
La construcción data de la primera mitad del siglo XVII y hasta julio de 1.812 perteneció a la casa de Los Valdés, cuyas armas, justamente con las de Labandera, con cuya familia en algún momento estuvieron emparentados, están en la fachada principal.
En julio de 1.812 adquiere la casa, por compra, el canónigo tesorero de la SIB Catedral de Oviedo, D. Lucas González Zarzuelo, que era natural de Nava del Rey, en la provincia de Valladolid.
En 1.826 a la muerte de D. Lucas, sus herederos venden el PALACIO al Excmo. Sr. Felipe Suarez Olay, que era presidente de la Audiencia Territorial del Principado y que completa la posesión, comprando una serie de fincas durante los años 1.833 y 1.834 a D. José González Valdés y su hijo D. Vicente, que eran los descendientes de los Fundadores de la CASA y quienes, para realizar estas ventas, tuvieron que pedir permiso a la Real Cámara para desvincularlas.
En 1.855, a la muerte de D. Felipe, la propiedad pasa por herencia al Excmo. Sr. D. Tomás Suárez Pedregal, que fue Oficial Mayor del consejo de Estado y Caballero de la orden de Jerusalén.
D. Tomás permaneció soltero y, a su fallecimiento, en marzo de 1.906, hereda esta propiedad su sobrina, Doña Zoa Suárez González, que también fallece sin dependencia.
Por ello, en marzo de 1.932, hereda el PALACIO Doña María Anunciación López del Vallado y Suárez, sobrina de Doña Zoa, ya que era hija de su hermana, Doña Consolación Jerónima, y el Excmo. Fermín López de Vallado y Bratnat, que fue alcalde de Oviedo.
En junio de 1.961 fallece, también sin descendencia, Doña María Anunciación y, por disposición testamentaria, la herencia pasa a los hijos de su hermana de simple vínculo, Doña Carmen López del Vallado y Valdes-Busto, quien a su vez, era descendiente de la primigenia familia Valdés, fundadora de la CASA.
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